Global union. Sun copulates with Moon.
Nudity. Cosmic bodys reflecting the shadows of the siege. The stellar passions stimulate the human eye’s presence, multi-vista.
In frot of a bed of the universe, in erect position, the amazements get excited each other.
We are eroticised tele-sighted people.
Calm crystals go down to Earth, poetic water of love, the rain that fertilizes.
The sidereal love is a flaming pollen of which caresses print smiles to the light.
When Sun and Moon move away one from another, one understands why Sun spills its light on the Earth, once again.
Argemiro Menco Mendoza, from the poetry book Las sombras del asedio (Los Conjurados, 2007).
Unión global. El Sol copula con la Luna.
Desnudez. Cuerpos cósmicos proyectando las sombras del asedio. Las pasiones estelares estimulan la presencia del ojo humano, multivista.
Frente a una cama del universo, en posición erecta, se excitan los asombros.
Somos televidencia erotizada.
A la Tierra descienden cristales serenos, agua poética de amor, la lluvia que fecunda. El amor sideral es un polen encendido cuyas caricias estampan sonrisas a la luz.
Cuando el Sol y la Luna se separan, uno comprende por qué el Sol derrama su luz, una vez más, sobre la Tierra.
YETI
Estamos en el monte más alto,
la nieve más albina,
la huella más extensa,
la mancha más impura,
el oso más extraño,
la sombra más negra,
el gigante más titánico,
la leyenda más nevada,
la historia más blanca,
el hombre más fornido
y más abominable,,,
Estamos en la cueva más oscura.
HERÁLDICA Y SANGRE PARADOJAL
El hijo de Héctor
creció como un príncipe de paz.
Pero.....
los nietos de aquel héroe,
y de Andrómaca, anduvieron
poseídos de manchas heredadas:
se sentían orgullosos de su origen,
cada uno de ellos se creía
una gota de sangre,
que descendía de la lanza
de un guerrero.
EXORCISMO
El odontólogo le aplica
una jeringa de agua mágica
al colmillo del vampiro.
DOCTRINA DEL VIGÍA
Un poste de luz, como un gran señor, tiene, en su frente de vigía, un faro de vista mercurial. Los celadores que no pegan sus ojos son bombillos despiertos en la noche.
Bombillos que ladran encendidos: tinieblas que se espantan en el túnel del aire.
Bombillos apagados: tinieblas que se amañan.
Hay bribones que asaltan
al amparo de las sombras.
El centinela que apaga sus atisbos
es un cómplice barato de la noche.
Mientras cazamos al cobarde, diente por diente, hay un foco de penumbras que nos guía. Vamos a embotellarlos en la oscuridad de sus propias armas. Hay vigilancias que requieren de tactos penumbrosos. Sean de noche o de día, la vista, los oídos y el olfato, excesivamente despiertos.